RECUERDOS de RUTA

Bueno Amigos, os presento este foto-vídeo creado por mi amigo Loren y dedicado a mi entre otros. Me llena de orgullo y satisfacción poder enseñároslos y que veáis e imanéis como pudimos pasarlo en la ruta que días atrás os comente. Saludos VVVVVVVVVVVV. MANE

Lo que ya sabemos

En la ciudad que vivo, como en cualquier otra, pueblo, aldea o algo parecido a una comunidad de vecinos, después de la resaca invernal de nieves, vientos , aguas, grandes tormentas al igual que celebraciones, belenes , reyes , Semana Santa y todo ello acompañado de potajes cuaresmales ,comidas, cenas ,dulces y un tanto mas de excesos innecesarios. Todos estos actos la mayoría de veces celebrándolos en casa por las inclemencias del tiempo y que por eso del frió en casa es donde mas agradable se puede estar.

Ahora se abre una nueva época tanto natural como cultural. Digo natural por que es la estación propicia para visitar el campo, los parques, la montaña, la playa...etc. lugares que se convierten en idílicos por la belleza de sus flores, su fauna y con preciosos parajes acompañados de agradables temperaturas.
Y cultural por que es el momento de celebrar cualquier cosa para salir a la calle de cualquier ciudad, pueblo o lugar. En esta ciudad se presenta actos como "FORO-SUR",
"WOMAD",

"MERCADOS MEDIEVALES"

, "FERIAS" y "FIESTA MAYOR". Con esto quiero decir que todo vale para poder reunirse en la calle, en cualquier plaza mayor, en distinta sexcursiones.

Con la escusa de que es un momento propicio para ello por que los actos con amigos y familiares alrededor de un buen vino , cerveza o una delicattesen siempre es mas apetecible.
Tengamos en cuenta que:
"SOLO SE VIVE UNA VEZ".

Mane

Por tres cochinos minutos. Arturo Pérez Reverte.

“A ver si consigo que me leas con atención, Fulano o como te llames. Porque hace poco me mataste a un amigo. Y digo amigo, porque lo era. De verdad. No le había visto la cara nunca, pero eso no importa. Lo era, repito. Leía mis libros, y también esta página cada semana. Tenía 28 años, era bien parecido, deportista, corría diez kilómetros cada día. Buena pinta, sano y fuerte. Además era un tipo noble, sencillo, derecho, con sentido del honor como los de antes, con palabra, apretón de manos franco, y todo eso. Con sentido del humor, además, lo que era un regalo, un don de la existencia para quienes estaban con él. Había aprendido a disfrutar de la vida con dignidad y con decencia. Hay gente que vive noventa tacos de almanaque y nunca llega a ser tan sabia y lúcida como lo era él. Amaba el mar, como yo. Tenía una familia, una novia, unos amigos. Tenía una perra que ahora lo busca con ojos leales y tristes, moviendo el rabo esperanzada cada vez que alguien roza la puerta. Tenía un futuro. Si tú se lo hubieras permitido, habría llegado a ser un tipo de esos que hacen el mundo soportable, en vez de una cloaca sucia y oscura, a merced de irresponsables como tú.

También tenía una moto, aunque no era uno de los que van haciendo el cimbel como suicidas prematuros. Aquella mañana circulaba despacio, cerca de la playa, con el casco puesto y guardando las precauciones adecuadas. Y ése fue el momento que elegiste, maldita sea tu estampa, para salir con el coche de la gasolinera a toda velocidad, saltándote tres carriles antes de girar en dirección prohibida, a fin de ahorrarte los cien metros hasta el siguiente cambio de sentido. Llevabas a tu mujer y a tu hijo en el coche, y aun así hiciste esa pirula. Te jugaste tu vida y la de ellos por ganar tres minutos, y arrancaste de cuajo la de otro. Le diste de lleno, clac. Moto y motorista a tomar por saco. Doce días en coma, luchando entre la vida y la muerte. Y luego, ya sabes. Como esos aparatitos de las películas: la línea recta en el monitor. Piiiii. Pero no era una película, sino la vida de un joven lleno de sueños y esperanzas. Por usar un lenguaje de cine y que lo entiendas, cretino: cuando matas a alguien le quitas todo lo que tiene y todo lo que podría llegar a tener.

Por supuesto, ahora estás en la calle, tan campante. Los miserables como tú no van a la cárcel. Ignoro exactamente qué te cayó, si es que fue algo además de tres meses sin permiso de conducir. Si la gentuza de tu calaña fuera al talego cada vez que despacha a alguien, las cárceles iban a parecer el camarote de los hermanos Marx. No hay más que veros pasar al volante, inconscientes, letales, a toda leche, creyéndoos inmortales. Seguros, como fue tu caso, de que si alguien palma, será otro. Así que imagino que a estas alturas ya estarás conduciendo de nuevo, como si nada. Los jueces son comprensivos en esto, por lo general; y en cierta forma toco madera, porque la vida da muchas vueltas y nunca se sabe. Ignoro si un día seré yo quien tenga que verse ante un juez. Pero tales son las contradicciones de la vida. Además, lo mío es sólo una hipótesis: no suelo ahorrarme esos cien metros hasta el cambio de sentido, ni me salto los carriles de tres en tres, ni circulo como un majara. Lo tuyo es una realidad: estoy hablando de ti y de tu caso. No tengo toda la información, pero sí la sospecha de que, en vez de prohibirte conducir durante el resto de tu vida, o mandarte un año a trabajar, por ejemplo, al hospital de tetrapléjicos de Toledo, ayudando a gente a la que otros como tú jodieron la vida, supongo que la Justicia, benévola, habrá permitido que te redimas con el pago de una multa. Es lo que suele. Y ahora ni remordimientos tienes, ¿verdad? Parece mentira la capacidad de supervivencia y egoísmo del ser humano. Cómo nos convencemos a nosotros mismos de que la mala suerte, el destino, etcétera, tuvieron la culpa. Al final siempre resultamos asquerosamente inocentes. De todo. Y quién te ha visto y quién te ve. Quién reconocería ahora en ti al lloroso mierdecilla que se justificaba ante los guardias, desolado, frente al cuerpo tirado en el suelo, aquel día de la gasolinera. Pasa el tiempo, y nos justificamos, y si los dolores propios terminan diluyéndose en el recuerdo, para qué decir de los dolores ajenos.

Por eso escribo hoy esta página. Para recordártelo. Para contar que me arrebataste a un amigo al que nunca llegué a conocer. Para decirte que ojalá revientes. Cabrón.”

Por Arturo Perez Reverte

Artículo original publicado en XL Semanal

Exitosa ruta "El Cerezo en Flor"

Mañara primaveral, nos citamos a las 11h. y aunque con un poco de retraso acudimos "Al Gallo" una legión de pilotos arropados una vez más por los GRANDES PILOTOS DEL INFIERNO
Partimos por la ruta de la plata, fuimos bordeando la orilla del Tajo, rodamos por Cañaveral, Grimaldo llegando a Plasencia donde ya empezaba a picar un poco el sol. Metidos en el Valle Jerteño se unieron al grupo 2BMW más, comenzamos a ascender por la vertiente derecha cruzando pueblos como El Torno y Rebollar, empezando a ver los primeros cerezos florecidos,

la travesia iba tomando color, de nuevo en la N110 pasamos Navaconcejo, era tal magnitud de visitantes que antes de entrar en Cabezuela del Valle ya habia caravana con lo cual se decide dar la vuelta hacer una pequeña parada y tomar la carretera de los pueblos de la vertiente izquierda. Subimos a Valdastillas y tomando un camino vecinal nos adentramos en un sendero de cerezos florecidos que parecian haciendonos un pasillo de honor al paso de la fila de motos (jejeje que pijo me ha quedado)

Después de abrevar y refrescarnos en la fuente y de inmortalizar el momento en un sin parar de fotos los estomagos grujian y llegamos "Al Mirador de Las Casas" en Casas del Castañar donde nos deleitaron con sus platos caseros y regados por unas apetecibles cervezas bien frias

El regreso no fue peor por que pudimos disfrutar de fotos como la cola de la presa del rio Jerte

Aunque algunos detalles y fotos quedaron en el diario y otros miembros de ruta se encargaran de publicar,eso fue todo....poco pero intenso y emocionante.

Mane

KEDADA MOTERA

RUTA DEL CEREZO EN FLOR


SALIDA : 10h.00 : D. Benito


RUTA : Valdefuentes, Torreorgaz, Cáceres
( nos juntamos con Mane aproximadamente a las 11h.00 )


Por N-630: La Perala, Cañaveral, Grimaldo, Plasencia.

D.Benito- Plasencia 200 km. 02h.30


RUTA Por N-110 : Plasencia – Valle de Jerte – Plasencia 91km.

12h.30 parada y café en "Restaurante REGINO"


13h.00 RUTA: El torno, Rebollar, Navaconcejo,
Cabezuela del Valle, Jerte, Cabezuela del Valle,
Navconcejo, Valdastillas, Cabrero, Casas del Castañar.


14h.30 – 15h.00 ALMUERZO:

Restaurante "El Mirador de Casas del Castañar"

REGRESO : Casas del Castañar, Plasencia, Cáceres,
D. Benito 02h.45


*Total desde D. Benito aproximadamente 490km. 09h.00
*Total desde Cáceres aproximadamente 290km. 07h.00